Ponencia Dra. Ligia Amada Melo de Cardona en desayuno temático AIRD

Ponencia Dra. Ligia Amada Melo de Cardona en desayuno temático AIRD
Noticias

Las tendencias mundiales de crecimiento económico y social están basadas en el desarrollo y la integración eficaz y efectiva de las ciencias, las tecnologías y la innovación en los sistemas productivos y en la cotidianidad de las sociedades en general. Por lo tanto, es considerado actualmente que la innovación y el desarrollo tecnológico son variables fundamentales para el proceso de crecimiento económico y social de un país.

La innovación se considera, desde la revolución industrial, responsable del aumento de la calidad de vida y del incremento de la productividad. Por eso la preocupación por entender la relación entre desarrollo e innovación tiene larga data. Economistas han estudiado y escrito sustancialmente sobre esta relación desde principios del siglo XX. Por citar algunos trabajos, a partir de las investigaciones de Schumpter publicados desde 1911 se identifica la innovación como elemento principal en el desarrollo económico sostenible y a partir de los trabajos de Solow de 1957, se comienza a incluir a la tecnología como un factor de producción. 

Ahora bien, qué debemos hacer como individuos, en nuestras empresas y como país para poder competir con niveles relativos o comparables de innovación? Que elementos debemos tomar en cuenta para que exista innovación?

Para esto tenemos que ver como se mide. La OECD mide la innovación de un país tomando en cuenta los Gastos en I+D por sectores, Cantidad de personas dedicadas a I+D por sectores como % del total empleado y Patentes PCT (Tratado de Cooperación de Patentes).

El Foro Económico Mundial ha identificado 7 pilares de la innovación: capacidad para innovar, calidad de instituciones de investigación y científicas, gastos de empresas en I+D, colaboración en I+D entre universidad empresa, compras gubernamentales de productos tecnológicos, disponibilidad de ingenieros y científicos y patentes PCT.

Estos indicadores suponen entonces que a mayor inversión en investigación y desarrollo mayor innovaciones. Y es exactamente así para cualquier actividad económica especialmente el de manufactura. Existe una correlación positiva entre I+D e Innovación: a mayor I+D, mayor posibilidades de innovación.

Evidencias como resultado de investigaciones económicas afirman que los países que han logrado procesos de crecimiento económico sostenibles y acelerados, han tenido fuerte incremento en su productividad mediante la inversión crecida y sostenida en investigación, en desarrollo de tecnologías y en innovación.

Por lo tanto existe suficiente evidencia empírica donde se presenta una relación sólida y estable entre las inversiones en innovación y el aumento de la productividad.

Por eso las afirmaciones de diferentes autores como "el crecimiento sostenible depende de aumentos en productividad (Lederman y Maloney, 2003)",

"El aumento de productividad ha sido resultado de olas de cambio tecnológico e innovación y el cambio tecnológico continuo requiere actividades sistemáticas de Investigación y Desarrollo" (Guellec, 2001).

La evidencia muestra que casi la mitad de las diferencias en los niveles de crecimiento y las tasas de crecimiento del ingreso per cápita entre los países, se debe a la Productividad Total de los Factores (PTF), mientras que las actividades de I+D podrían ser responsables de al menos el 75% de las diferencias del crecimiento de la Productividad Total de los Factores.

En el estudio "I+D y Productividad", publicado en el 1995 por el economista Griliches, determinó que las empresas que gastan una mayor proporción en actividades de I+D son más productivas y que este efecto es relativamente constante en el tiempo. También afirma que el nivel de productividad alcanzado por una empresa o sector industrial no sólo depende de sus propios esfuerzos de investigación, sino también del nivel de acceso a los conocimientos producidos por las investigaciones realizadas.

De acuerdo con una publicación del BID1 del 2011 sobre empresas Panameñas, es aparente que la causalidad va desde innovación a incremento en productividad y crecimiento y no vice-versa. Esta teoría tanto a las economías industrializadas, como las economías en vías de desarrollo.

Muchos análisis y escritos afirman a menudo que es necesario mejorar la competitividad y aumentar las exportaciones como estrategia para crecer; sin embargo, un estudio reciente conducido por el BID sugiere que el aumento de la productividad es clave para lograr lo anterior. Además aumentando la productividad se logra impulsar el crecimiento económico y reducir la pobreza en América Latina y el Caribe en los próximos años.

Debemos reconocer que la competitividad es la capacidad de una empresa para crecer en tamaño, en cuota de mercado y en rentabilidad.Michael Porter señala que esto se logra a través de la innovación constante que genere aumentos de productividad y que la competitividad de una nación depende de la capacidad del conjunto de sus sectores productivos para innovar.

Tradicionalmente la competitividad se veía como la capacidad de reducir los costos de producción, lo que lleva a buscar ventajas como principalmente en bajos sueldos. Sin embargo, la visión actual es identificar factores que determinan la capacidad de alcanzar y mantener una posición ventajosa frente a cambios tecnológicos, económicos y sociales a través de la investigación y la innovación.

Ahora bien el vínculo desde la investigación y desarrollo hasta crecimiento económico y de la innovación hacia crecimiento de la productividad es complejo y depende de muchos factores. Estos factores incluyen: la capacidad de creación de conocimientos y de incorporación de tecnologías, financiamiento, modo de ejecución, inversión extranjera directa, infraestructura,

Hemos determinado que las actividades que resultan en innovación son actividades científicas, tecnológicas, organizativas, financieras y comerciales. Pero estas actividades no necesariamente tienen que ser de alta tecnología o de alto contenido innovador. Se consideran además como actividades que pueden resultar en innovación las fases de desarrollo de pre-producción y distribución, actividades de desarrollo con bajo grado de novedad, actividades de apoyo como la preparación de formación y comercialización, adquisición de conocimiento externo o de bienes de capital que no son parte de la I+D.

Sin duda, innovar tiene sus riesgos. Los esfuerzos de investigación y desarrollo no tienen una relación lineal con la innovación. Pueden ser procesos largos e interrumpidos y el retorno a la inversión no siempre está garantizado.

Entre los elementos claves a tomar en cuenta para mejorar las capacidades de innovación de un país se consideran:

Tener claro cuáles son los aparatos institucionales que deben ser desarrollados para que la ciencia, tecnología e innovación se integren de una manera más eficaz y efectiva en los sistemas productivos y en la cotidianidad de las sociedades en general.

Los puntos centrales que deben ser considerados son la articulación y coordinación de sectores productivos, academias y Estado y la creación de instrumentos e incentivos. Es fundamental una mayor integración de los intereses políticos, académicos e industriales en la conducción, gestión y fomento de la innovación.

La noción de sistema nacional de innovación ayuda a identificar estas dimensiones, mostrando la importancia de la cooperación y articulación entre las condiciones institucionales que directa e indirectamente se relacionan con el desarrollo económico y el aumento de la productividad a través de la innovación y no a través de políticas proteccionistas que limitan las capacidades para innovar.

El principal foco de análisis del concepto de un sistema nacional de innovación es la interacción entre los agentes económicos, sociales y políticos del sistema, que favorecen el desarrollo de capacidades y la difusión de las innovaciones. Bajo este esquema el marco institucional incluye el contar con: recursos humanos para la investigación y la innovación, agentes públicos que diseñen la agenda o estrategia de desarrollo, tomando en cuenta la generación de mecanismos de incentivos para que las empresas innoven y sean capaces de aprovechar los incentivos, crear valor y aumentar su productividad.

En consecuencia, los sistemas nacionales de innovación y desarrollo tecnológico pueden definirse como la organización económica y social que facilita y estimula la interacción de los sectores generadores de conocimiento, con los sectores y agentes productivos, permitiendo que estos incorporen nuevas prácticas productivas, mejoren y desarrollen nuevos productos y servicios, de tal suerte que se incrementan los niveles de utilidad de unos y otros sin que se comprometa el bienestar de cada una de las partes.

En nuestra sociedad se ha reconocido la importancia de la educación y de generar conocimiento para lograr niveles sostenibles de crecimiento del país. El índice de la economía del conocimiento, es una herramienta desarrollada por el Banco Mundial, el cual mide cuatro dimensiones interrelacionadas: los incentivos económicos y el entorno institucional; el uso de las tecnologías de la información y la comunicación, la innovación y la educación.

Los incentivos económicos y el entorno institucional se miden por: (i) barreras tarifarias y no tarifarias; (ii) calidad de la regulación y (iii) cumplimiento de las leyes.

La variable TIC's se mide por (i) líneas telefónicas; (ii) computadoras y (iii) uso de internet por cada 1000 habitantes.

La variable innovación se mide por: (i) número de investigadores en actividades de I+D; (ii) número de patentes, (iii) la producción científica y tecnológica medida en el número de artículos producidos y publicados en revistas indexadas.

La variable educación se mide por: (i) tasa de alfabetismo de adultos; (ii) matriculación secundaria y (iii) matriculación terciaria.

En la actualidad, un entorno globalizado y muy tecnificado, para competir requiere invertir en el conocimiento y también capitalizarlo. Los recursos humanos tienen que ser capacitados para potenciar el desarrollo productivo y para responder a las necesidades de la sociedad.

Consciente del valor de la innovación y de la necesidad de impulsarla en el país, el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología ha trazado políticas y está desarrollando programas encaminados a esos fines.

Entre los mismos podemos citar los siguientes:

Elaboración, aplicación y seguimiento del Plan Estratégico de Ciencia, Tecnología e Innovación 2008-2018.

Impulso a la investigación a través del Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico. (FONDOCYT)

Congresos Internacionales de Investigación Científica. Celebrado de manera ininterrumpida desde el año 2005 al 2013. En el 2013 contó con la participación de 60 países y más de 160 ponencias.

Formación de recursos humanos con énfasis en las carreras científicas y tecnológicas a través del programa de becas nacionales e internacionales.

Encuestas Nacionales de la presencia de la Innovación en los sectores empresariales y universidades. Año 2007 y 2010.

Rediseño curricular de las carreras de formación de profesores, ingenierías, medicina y enfermería.

Programa de Desarrollo de Emprendurismo Universitario con la participación de 18 universidades, lo cual incluye desarrollo de competencias de ideas y planes de negocios.

Cursos y Talleres sobre Innovación, Desarrollo de I+D, Gestión de la Innovación, con académicos y empresarios.

Programa de Apoyo a Instituciones de Educación Superior en Vinculación Universidad Empresa. Iniciado en 10 IES.

Estudio de Necesidades de Recursos Humanos en el país y en la provincia Santo Domingo. Años 2006 y 2010. Actualmente en proceso de licitación de un nuevo estudio en 8 regiones del país.

Celebración de Ferias de Inventos.

Cursos de Innovación y uso de tecnologías en PYMES a iniciarse en los próximos días.

Fomento al desarrollo de las Ciencias Básicas.

Motivación a las instituciones de Educación Superior, para la creación de carreras científicas y tecnológicas.

Participación en el diseño, programación e implementación del Instituto Técnico Superior Comunitario, equivalente a Community College.Actualmente a solicitud de la Presidencia de la República, estamos realizando los estudios para la creación de dos nuevas instituciones de esta modalidad, ya que se tienen la intención de ampliar la formación de técnicos en carreras cortas que puedan contribuir con el sector

De los proyectos mencionados anteriormente, queremos destacar los siguientes: Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico y la Reforma curricular de las carreras de ingeniería.

La Ley No.139-01 de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, en su Artículo 94, crea el Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDOCYT), para desarrollar y financiar actividades, programas y proyectos de innovación e investigación científica y tecnológica y establecer un sistema de promoción permanente de la investigación científica y tecnológica nacional.

Uno de los objetivos de este fondo es fortalecer las capacidades de investigación en ciencia y tecnología para contribuir a la elevación del nivel de competitividad del país.

Objetivos Específicos

Compartir con el colectivo de investigadores los proyectos que se van a realizar en el país dentro de las prioridades fijadas por la Secretaría de Estado de Educación Superior, Ciencia y Tecnología;

Exponer a estudiantes a la dinámica de la investigación científica para incentivarlos al trabajo compartido y

Promover el intercambio entre investigadores e instituciones que ejecutarán los proyectos de investigación financiados por el Fondo para el Desarrollo Científico-Tecnológico (FONDOCYT).

El FONDOCYT es una herramienta para promover el avance general de las ciencias, ingenierías, tecnologías y desarrollo de las actividades innovadoras articuladas a la dinámica del desarrollo nacional, al posicionamiento competitivo de los bienes, productos y servicios generados en la economía nacional y al mejoramiento de la calidad de vida.

El reglamento que rige FONDOCYT es un instrumento fundamental para el desarrollo de una cultura científica, tecnológica y de innovación en República Dominicana, tanto institucional como en la población académica y empresarial. Su aplicación permite a las universidades, centro s de investigación y empresas, colocarse en posición de competir internacionalmente y al Ministerio solicitar y ofertar colaboración para la evaluación de propuestas de investigación en cienciia, tecnología e innovación.

Siempre, usando com o base PECYT+I 2008-2018, se identificaron cinco grandes áreas con sus respectivos campos y lineamientos específicos:

la investigación básica;

la investigación aplicada;

el desarrollo experimental;

la inve stigación y desarrollo (I+D) y

la innov ación (productos y procesos).

Áreas de Financia miento

El FONDOCYT entre los años 2005-2013 ha financiado un total de 200 proyectos de investigación con igual número de investigadores, con una inversión de más de 600 millones de pesos. En la convocatoria del 2013 se recibieron 137 propuestas de proyectos de los cuales 33 fueron aprobados, y 3 fueron presentados por empresas nacionales.

Reforma Curricular de las Carreras de Ingeniería

El propósito fundamental de la iniciativa es reformar los programas de estudios de ingeniería ofertados en universidades con el fin de mejorar la capacidad analítica de los ingenieros y adaptar la oferta de carreras a los requerimientos del sector productivo. Un segundo componente de este proyecto es el fomento de la cultura emprendedora a través del apoyo a la creación de tres centros de emprendimiento e innovación adscritos a facultades de ingeniería para así mejorar la contribución de los ingenieros en la creación de nuevas empresas de base tecnológica e intensivo en conocimiento.

Para llevar a cabo las actividades de diagnóstico, evaluación y recomendaciones para la reforma curricular y la creación de los centros de emprendimiento, consultores de la prestigiosa universidad Korea Advanced Institute of Science and Technology (KAIST) de Corea del Sur asesoran al Ministerio debido a su vasta experiencia en el área de ingeniería y por realizar proyectos reconocidos de alto impacto en el desarrollo de Corea. Un equipo nacional compuesto por 5 representantes del sector académico y cinco representantes del sector productivo, integraron la Comisión de Ingeniería para darle seguimiento local a las actividades de diagnóstico y evaluación.

Para el proceso de diagnóstico las universidades realizaron un proceso de Auto-evaluación interno de las facultades de ingenierías incluyendo cinco (5) áreas específicas de trabajo:

Currículo

Estudiantes

Cuerpo de Profesores

Infraestructura Física y de laboratorios

Resultados del aprendizaje

Luego del análisis de la autoevaluación de las universidades, los consultores de KAIST ofrecieron las siguientes recomendaciones para mejorar las carreras de ingeniería:

Establecer un examen de admisión para las carreras de ingeniería

Asegurar un cuerpo de profesores que laboren a tiempo completo

Desarrollo de un Programa de Formación y Capacitación Docente: Fomento a la capacitación avanzada de profesores (formación PhD)

Fomentar a través de acuerdos la relación con el sector empresarial. Específicamente para fortalecer programas de pasantías, trabajos finales (proyectos integradores) de los estudiantes, prácticas, etc.

Creación de una estructura institucional para la actualización de la Ingeniería.

Para el diagnóstico del Mercado Laboral se realizaron varios talleres con la participación de más de 100 empresarios e industriales en Santo Domingo y Santiago para determinar las competencias necesarias para satisfacer la demanda de capacidades que requiere el mercado. En estos talleres se aplicó una "Encuesta al Sector productivo", para identificar las debilidades y fortalezas en la formación de ingenieros así como las necesidades específicas en las distintas áreas de formación.

Las respuestas más comunes sobre las deficiencias de los ingenieros fueron las siguientes:

Bajo nivel de profundidad en análisis Profesionales desactualizados

Pocas destrezas en sistemas y programas de computadora.

Poca capacidad administrativa y de liderazgo Mucha teoría y poca práctica

Nivel de inglés muy bajo

Los empresarios en la República Dominicana han expresado que no existen suficientes ingenieros graduados con las habilidades requeridas para satisfacer la demanda de la industria. El egresado tiene serias deficiencias en la práctica y en el conocimiento de procesos además de baja capacidad analítica. No está bien preparado en proyectos o en gestión y liderazgo. En algunos casos, los empresarios informaron que no contratan ingenieros porque no son necesarios. Para ser más específicos, los técnicos con más experiencia práctica y menos académica, los cuales además son mano de obra barata, pueden satisfacer la demanda.

Esta última justificación de parte de los empresarios e industriales se debe a que el nivel tecnológico de las industrias nacionales es bajo y en general la mayoría de nuestras empresas no destinan recursos financieros y humanos a producir mejoras sustanciales a los procesos, productos o servicios, al igual que las mismas no son intensivos en conocimiento.

Se presentaron además algunos casos de empresas que tienen departamentos de I+D y que dedican recursos para estas actividades y en caso de no contar con el citado departamento utilizan los servicios de instituciones como el IIBI, IDIAF e ISA.

En fecha 13 de Agosto mediante la resolución No. 63-2012 del Consejo Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología se aprobaron aprueba las Normas para la Aprobación y Regulación de las Carreras de Ingeniería y desde entonces las universidades que ofrecen carreras de ingeniería están inmersas en el proceso de implementación, acompañados de seguimiento de un equipo de ingenieros contratados por el MESCYT para esos fines.

Es la aspiración de nuestro Ministerio de continuar impulsando el desarrollo de las ciencias, la tecnología y la innovación, a través del fortalecimiento de los programas ya ante expuestos, de la creación de nuevos programas y de una participación más activa de nuestras instituciones de educación superior en esas áreas. Pero especialmente es de nuestro gran interés que en el país se establezca una fuerte sinergia, con el trabajo conjunto, de los sectores productivos, las académicas y el sector gubernamental, para lo cual deseamos su colaboración y mantener el interés que han demostrado en la elaboración del Plan Quinquenal o Plan Estratégico que aprobaron el pasado año, en el cual figura de manera expresa como política, el fomento a la innovación y la vinculación con los sectores productores del conocimiento.

Publicado por AIRD
Es la organización empresarial más grande y representativa del sector industrial en la República Dominicana, que agrupa a más de 200 empresas y asociaciones regionales y sectoriales de la industria en todo el territorio nacional.

Publicaciones Relacionadas: